México culmina su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024 con un balance agridulce, habiendo cosechado un total de cinco medallas: tres platas y dos bronces.
Aunque la delegación nacional superó el número de preseas de Tokio 2020, el ansiado oro olímpico volvió a escaparse, extendiendo a 16 años la espera por un nuevo campeón olímpico.
Osmar Olvera: la estrella mexicana en París
La mayor revelación del equipo mexicano fue el clavadista Osmar Olvera, quien brilló en el Centro Acuático de París. El joven capitalino de 20 años logró subirse al podio en dos ocasiones, consolidándose como la figura principal de la delegación. Olvera obtuvo la medalla de plata en la prueba de trampolín sincronizado de tres metros junto a Juan Celaya, y un bronce en la modalidad individual. Con esta actuación, Olvera se unió a la élite de los clavados mexicanos, siguiendo los pasos de Joaquín Capilla al convertirse en uno de los pocos clavadistas en conseguir dos medallas en una misma edición de los Juegos.
"Estoy contento con mi desempeño, pero quiero ganar la de oro. Voy a trabajar muy duro los próximos cuatro años para poder alcanzar mi meta", declaró Olvera, visiblemente emocionado tras conseguir su segunda medalla en París.
Por otro lado, Alejandra Orozco, experimentada clavadista y medallista olímpica en Londres 2012, se despidió del deporte competitivo en esta edición. La tapatía cerró su carrera con un quinto lugar en la plataforma sincronizada y un octavo en la prueba individual.
Nuevas sorpresas en judo y boxeo
El equipo mexicano también sorprendió en disciplinas menos tradicionales para el país. La judoca Prisca Awiti y el boxeador Marco Verde lograron medallas históricas. Verde, campeón panamericano, hizo historia al convertirse en el primer mexicano en 40 años en alcanzar una final olímpica en boxeo, asegurando la medalla de plata en la categoría de 71 kilogramos. Awiti, por su parte, subió al podio como la primera judoca mexicana en lograr una medalla olímpica, cumpliendo así con las expectativas a pesar de que era poco favorita al inicio de la competición.
El equipo femenil de tiro con arco, compuesto por Alejandra Valencia, Ana Paula Vázquez y Ángela Ruiz, también hizo su aportación al medallero con un bronce por equipos. Sin embargo, el resultado dejó un sabor agridulce al no haber alcanzado medallas en las modalidades individuales y mixtas.
Decepciones en taekwondo y otros deportes
En contraste, el taekwondo mexicano vivió su segundo ciclo olímpico consecutivo sin medallas. A pesar de ser una de las disciplinas con mayor apoyo económico por parte del gobierno, los representantes nacionales no lograron subirse al podio, algo que no sucedía desde que María Espinoza obtuvo el bronce en Río 2016.
El debut de México en gimnasia rítmica por equipos no logró los resultados esperados, pero abrió una puerta para futuras participaciones. En gimnasia artística, Alexa Moreno, quien llegaba con altas expectativas, no pudo clasificarse a las finales de all around y salto de caballo.
Por su parte, el equipo de natación artística, liderado por Nuria Diosdado, regresó a un escenario olímpico después de 28 años, ubicándose en la octava posición en la rutina libre, con una destacada actuación que dejó una grata impresión entre los jueces.
Reflexiones y proyecciones hacia Los Ángeles 2028
Tras el cierre de los Juegos, la titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Ana Guevara, ofreció una valoración del desempeño mexicano en París. "Falta una preparación más ambiciosa, que verdaderamente se la crean. El número deseado que anunciamos, ese posible 9, se quedó sólo en el intento, pero el balance es bueno", señaló.
Aunque México superó los resultados de Tokio 2020, el reto de alcanzar nuevas alturas en Los Ángeles 2028 ya se vislumbra en el horizonte, con la esperanza de que figuras emergentes como Osmar Olvera puedan finalmente llevar al país a la cima del podio olímpico.
Fuente: El Tiempo