LAS DE CÓDIGO

Juan Carlos Rangel, titular de la Secretaría de Gobernación, mencionó que todos los días se revisan bares, cantinas y restaurantes-bar, supervisándolos hasta en un 95%. Los inspectores envían diariamente evidencia fotográfica, verificando que el 90-95% de los lugares sean inspeccionados para asegurar que no haya menores de edad, que no se extraigan bebidas alcohólicas a la vía pública y que el cierre se realice a la hora establecida por la ley. Señaló que, debido a las nuevas tecnologías, como los celulares y las redes sociales, es casi imposible engañar con facilidad.
El fin de semana, comentó que la situación se mantuvo tranquila, aunque, la madrugada del domingo, se vio en la necesidad de clausurar una barbería en la colonia Revolución, ya que no contaba con autorización para el consumo de bebidas alcohólicas en su interior, y mucho menos a altas horas de la madrugada. Agregó que ya había recibido varios reportes de ciudadanos al respecto.
La facultad de Gobernación es actuar en flagrancia, y en la madrugada del domingo se sorprendió a los responsables en este establecimiento, lo que dio lugar a la clausura y a la imposición de una multa. El lunes, la dueña del local ya había pagado la infracción y se comprometió a hablar con las personas que rentan el espacio para evitar que se repita esta situación.
Este fue el único incidente registrado en la ciudad, la cual se mantuvo muy tranquila, ya que las personas dedicadas a la venta de alcohol conocen perfectamente la ley y cumplen con ella.