El maltrato infantil es una constante en el mundo, sus consecuencias son devastadoras para quienes lo sufren tanto físicas como psicológicas y en algunos casos los hechos pueden ser mortales, como sucedió en Mariano Acosta, Argentina, cuando una bebé de dos años murió y aunque su madre quiso hacerlo pasar por una muerte accidental, la autopsia reveló una cruel verdad: fue asesinada. La mujer la llevó al hospital y dijo que se había caído de la cama.

La pequeña Milena tenía dos años de edad, las condiciones en las que fue llevada al hospital, estaba llena de moretones, hicieron que los médicos sospecharan que las cosas no habían ocurrido como la madre dijo, tenía signos de haber sufrido maltrato infantil, por lo que solicitaron se realizara una autopsia. Cabe resaltar que cuando la recibieron en el nosocomio, le realizaron maniobras de reanimación, pero nada pudieron hacer por la bebé.

Tenían la sospecha, faltaba la confirmación, ella reveló algo más escabroso de lo que imaginaron. Milena no solo murió por maltrato, sus últimas 24 horas de vida fueron una verdadera agonía. La autopsia fue ordenada por la fiscal Adriana Suárez Corripio, a la que se le dio parte del caso tras ver el cuerpo sin vida de la bebé.

La autopsia determinó que la nena tenía un golpe muy fuerte en la cabeza, una laceración en el hígado con hemorragia interna y golpes en el abdomen. También se realizaron radiografías, las cuales revelaron que tenía golpes de distinta evolución en todo el cuerpo y una fisura en la tibia de la pierna derecha con data de un mes. Además, se reveló que toda la noche antes de morir, la pequeña sufrió una verdadera agonía. También se dijo que perdió la vida varias horas antes de ser llevada al hospital.


Una vez que el informe forense fue dado a conocer, se ordenó la detención de la madre, Milagros Torres, de 22 años, y del padrastro de la menor, Darío Eduardo Chamorro, de 26. La orden de arresto se liberó por la Justicia de Garantías por el delito de homicidio agravado por el vínculo y homicidio simple, respectivamente. Los detenidos se negaron a declarar ante la fiscal solicitante.

Las declaraciones que dieron al principio decían que Milena estaba viendo la tele junto al hijo de su padrastro, de cuatro años, cuando los adultos escucharon un fuerte golpe, entraron y vieron que había caído de la cama, pero siguieron su vida normal, pues hasta el siguiente día la menor comenzó a presentar malestar y fue cuando la llevaron a recibir atención médica.


Ante la situación, la justicia ordenó que el hijo del hombre fuera reubicado para salvaguardar su bienestar, ya que de acuerdo a lo dicho por el propio detenido, el niño fue abandonado por su madre, debido a que tenían gran parecido físico y la mujer ya no quería verlos. Además, la niña tenía un hermanito de un año, el cual también fue puesto bajo resguardo, pese a que ninguno de los dos tienen lesiones aparentes.