El Jueves Santo, día del Amor Fraterno, la Iglesia recuerda el lavatorio de los pies, una escena impresionante que recoge tres gestos que son el amor, el servicio y el perdón.
En Delicias se realizó en el la Parroquia del Inmaculado Corazón de María, decenas de fieles asistieron a presenciar el simbólico lavatorio de pies para recordar el servicio que se debe brindar al prójimo sin importar género, raza ni nivel socioeconómico.
Gracias al servicio las personas se vuelven pequeñas, humildes, sencillas, iguales ante los ojos de Dios. Se abandona el egoísmo y se abre paso al prójimo.
El servicio es perdonar. Jesús lavó los pies a sus discípulos incluso al que sabía que lo iba a entregar, a Judas Iscariote.
Esta Semana Santa se invita a reflexionar sobre las diversas enseñanzas que dejó Cristo en su paso por el mundo.