La sequía que afecta a la entidad es la causa principal de esta problemática, según informó el ingeniero César Fierro, especialista en Calidad del Aire de la SDUyE
La ciudad de Chihuahua cerrará este 2025 con la peor calidad del aire de por lo menos los últimos 5 años, principalmente debido a la sequía que azota a la entidad, informó el ingeniero César Fierro Cárdenas, personal especializado en Calidad del Aire de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología.
Otros factores como los incendios forestales, los incendios urbanos, la contaminación vehicular en industrial, se suman a esta crisis ambiental.
Con relación a la tormenta de arena que se registró el pasado viernes 18 de abril, el ingeniero Fierro explicó que sin duda la ciudad de Chihuahua fue una de las zonas más afectadas, de tal forma que la calidad del aire llegó al nivel “extremadamente malo”, el más alto que se puede alcanzar por la presencia de partículas.
Las tormentas de arena y de polvo, son fenómenos meteorológicos que ocurren en regiones áridas y semiáridas y provocan grandes cantidades de partículas que pueden afectar a la salud.
Sobre la sequía que registra la entidad, explicó que la falta de lluvias ocasiona que la tierra no se asiente correctamente en las superficies, y por ejemplo, el solo paso de los vehículos provoca que el polvo se levante y quede suspendido en el aire, provocando un aumento de la mala calidad.
Pero incluso, si en este momento se parara toda la flota vehicular de la ciudad, la calidad del aire seguiría prácticamente sin cambios, es decir, no habría un gran cambio, a lo mucho bajaría un 10%, destacó.
Mencionó que hace 10 años, se registró un fenómeno similar al que se conoció como “Calima”, una ola de arena proveniente del desierto del Sahara.
En esa ocasión “una nube de polvo llegó desde el desierto de Sahara, por una corriente de chorro que venía desde aquel lado, cruzó todo el Atlántico, pasó por Cuba y terminó aquí en el norte de México”, relató.
Lo anterior, significa que estas tormentas ocurren de manera repentina, generando efectos como el observado en días pasados. Además de la tormenta de arena, en esta última ocasión se sumaron los incendios forestales y el incendio en el Relleno Sanitario de la ciudad de Chihuahua.
La medición de partículas en el aire, se realiza en microgramos por centímetro cúbico, y a mayor número de partículas disminuye esa calidad, o aumenta la “mala calidad” del aire. Esta información se muestra en un semáforo que clasifica la calidad del aire por colores. El verde es calidad buena; el amarillo, significa aceptable; el color naranja, mala; el rojo muy mala y el morado extremadamente mala.
El especialista explicó que la ciudad de Chihuahua pasó de una calidad del aire de entre buena y aceptable, a entre aceptable y mala en los últimos 5 años, alcanzando el peor nivel este 2025.
En la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología, se cuenta con tres estaciones de medición, dos de estas en la ciudad de Chihuahua, donde se miden el ozono y las partículas, riesgos a la salud y recomendaciones.
Las partículas se miden en las estaciones continuamente, cada hora, y esta información es enviada a la oficina de medición de Calidad del Aire, donde se concentra y se ve reflejado en la página de Calidad del Aire del Gobierno del Estado de Chihuahua y en el SINAICA.
Aunque fenómenos como la tormenta de arena no se pueden evitar, por tratarse de un evento meteorológico, existen acciones que cada persona puede realizar para el cuidado del ambiente.
Por ejemplo, disminuir el uso del automóvil, evitar encender fogatas, entre otras medidas, que permiten reducir la contaminación ambiental.
información: El Heraldo de Chihuahua