Autoridades hallaron diez cuerpos en la mina de Aquiles Serdán en la Cueva de los Murciélagos, incluyendo a dos hijos y el yerno de un pastor evangélico desaparecidos el 30 de octubre junto al obispo Álvaro Corral; el caso permanece sin detenidos ni avances.

Dentro de los cuerpos recuperados del tiro de mina en el municipio de Aquiles Serdán, autoridades recuperaron diez cadáveres el pasado 5 de noviembre, entre los cuales se encuentran dos hijos y el yerno de un pastor evangélico de la región.

Las víctimas fueron identificadas como Juan Núñez Acuña, Ezequiel Núñez Acuña y Jair Núñez Gandarilla, quienes habían sido reportados como desaparecidos desde el 30 de octubre, cuando viajaron a la ciudad de Chihuahua acompañando al obispo Álvaro Corral Martínez.

Los tres jóvenes, junto con un amigo de la familia, formaban parte del séquito del líder de la Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús en Durango; sus cuerpos mostraban evidentes signos de violencia y fueron arrojados a un pozo de aproximadamente diez metros de profundidad.

Hasta el momento, la investigación no presenta avances significativos; recordar que estos cuerpos se suman a los otros ya previamente identificados y entregados a sus familiares.

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