Se erradica matrimonio adolescente en Chihuahua pero prevalecen los embarazos en menores de edad. El Inegi reveló que en 2024 no se registraron casos, luego de que el Registro Civil oficiara 129 enlaces nupciales a pesar de que se prohibió en 2018. Para Marta González, presidenta del CAMT en 2024 dejó de ser una ley muerta que por fin está aplicándose debido a la presión de asociaciones civiles y medios de comunicación; sin embargo, señaló que el problema del embarazo adolescente no se ha podido eliminar ya que solo en 2024 se documentaron 3 mil 117 casos en todo el estado según la Estadística de Nacimientos.
Marta González Rentería, presidenta del Centro de Atención a la Mujer Trabajadora (CAMT) ofreció una entrevista exclusiva para El Sol de Parral celebró que este problema se haya erradicado por fin en Chihuahua, luego de seis años peleando para que dejara de ser ley muerta. Desde la visión feminista que brinda en sus declaraciones ella establece lo siguiente: “El matrimonio exige conciencia y responsabilidad. En la niñez y adolescencia no hay la madurez necesaria para enfrentar la vida en pareja”.
Durante la plática que tuvo con este medio resaltó que “como sociedad debemos fijar criterios claros: que las parejas no sean menores de 17 años y cuenten con la madurez para afrontar los retos que representa el matrimonio… Prevenir uniones tempranas ayuda a reducir conflictos y a bajar índices de violencia en el hogar.”
A la entrevistada que logró invalidar 12 actas que se oficiaron en 2023- todas las de ese año-, se le cuestionaron los factores que ayudaron a que este 2024 se redujera un 100 por ciento la cifra y ella respondió lo siguiente: “Este resultado es fruto de denuncias, reclamos y oficios dirigidos al Registro Civil, además del trabajo de medios como El Sol de Parral y organizaciones que visibilizaron las omisiones… Cuando la ciudadanía y la prensa inciden, las instituciones responden y aplican la ley.”
“Por fin la autoridad aplicó la ley que prohíbe el matrimonio infantil; en años anteriores hubo omisiones pese a la norma”, declaró.
Era un 24 de diciembre del año 2017 cuando las organizaciones civiles del estado de Chihuahua celebraban las modificaciones al Artículo 136 del Código Civil donde se prohibió el matrimonio entre personas menores de 18 años.
No obstante, estos cambios únicamente fueron en el papel debido a que hasta el año 2023, el Registro Civil del Gobierno del Estado de Chihuahua oficio y validó contratos nupciales para niñas de sólo 14 años de edad, de acuerdo con los datos exhibidos por en la Estadística de Matrimonios (EMAT) del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
De acuerdo con el análisis de los datos publicados en la EMAT, en el periodo de 2018 a 2023, se contabilizaron un total de 129 nupcias donde uno de los contrayentes era menor de 17 años de edad, destacándose que de este total eran 111 mujeres que se casaron con hombres mayores de edad
En este contexto problemático, la EMAT estableció que por primera vez desde que se prohibió el matrimonio adolescente en Chihuahua, esta entidad se quedó fuera de la estadística de conteo que a nivel nacional sumó siete, de los cuales dos fueron en Michoacán, el resto ocurrieron en Durango, Chiapas, Nuevo León, Quintana Roo y Sonora.
Por su parte González Rentería concluyó con esto: “No hay que dejar de manifestarnos ni de incidir. Si dejamos a las autoridades sin vigilancia, el desconocimiento y la inacción prevalecen… Reconozco el papel de los medios y de las organizaciones: su seguimiento constante hace que las cosas sucedan”.
Prevalece el embarazo joven en Chihuahua
En la opinión de González Rentería se expone lo siguiente: “En embarazo infantil no vimos avances; las autoridades están obligadas a trazar rutas de atención y fortalecer la educación sexual”.
En este contexto, se resalta que en 2024 el Inegi reportó que se registraron un total de 3 mil 177 casos de mujeres menores de 17 años que dieron a luz, lo que se considera como una omisión de las autoridades por no crear políticas publicas que erradiquen este problema que existe en zonas como la Sierra Tarahumara.
El problema en el estado de Chihuahua es tal, que incluso se han aparecido municipios de esta entidad entre la listas con las madres más jóvenes de todo el país debido a que se señala en la Asaciones civiles como el CMAT que se carece de avances en la conversación de la interrupción legal del embarazo.
Además del impacto sanitario, CAMT remarca las consecuencias educativas y económicas: cada embarazo temprano suele interrumpir trayectorias escolares y reduce ingresos futuros, perpetuando ciclos de pobreza en los hogares.
Otro eje es la corresponsabilidad masculina y la prevención primaria. La organización propone campañas dirigidas a varones adolescentes y adultos —incluidos padres y docentes— sobre consentimiento, paternidad responsable y sanciones por violencia sexual.